Los objetivos: Características principales, clases que disponemos y consejos útiles.

Hace unas semanas revisamos el concepto de la aberración cromática, ese defecto que producen los objetivos de nuestras cámaras en nuestras fotos en determinadas situaciones. Pues bien, hoy viajaremos más atrás aún. Vamos a hablar de los objetivos de las cámaras fotográficas desde cero, sus características y que clases tenemos a nuestra disposición. Se lo que estás pensando: “conozco bien todos los tipos de objetivos”, o “esto es demasiado básico para mi”. Pero créeme, tanto para el principiante (al que le suena a chino algunas características de las lentes y los tipos que hay, como me pasaba a mi), como para usuarios avanzados, nunca viene mal repasar algunos detalles que a lo mejor pasamos por alto o damos por sabidos.

El objetivo no es más que la parte de la cámara que dirige los rayos de luz hacia el sensor (o película) de nuestra cámara fotográfica, sea ésta réflex, compacta, la del móvil, etc.

Está formado por una o varias lentes convexas que proyectan la luz que lo atraviesan en un punto que denominamos foco.

El objetivo puede estar integrado permanentemente en la cámara (como lo tienen la mayoría de las compactas, aunque hay modelos que sus objetivos ya se pueden cambiar), o puede ser intercambiable, con diferentes longitudes focales, aberturas, etc.

  Los dos principales parámetros en un objetivo son la longitud focal y la apertura.

La longitud focal

La longitud focal del objetivo se define como la distancia entre el centro óptico y el sensor de imagen de la cámara (o plano de la película) cuando se ha centrado en el infinito. Para entender esta definición de la distancia focal, es necesario definir que es el centro óptico de la lente. Es el punto (por lo general, aunque no siempre) dentro de una lente, en el que se supone que los rayos de luz de dos fuentes diferentes se cruzarían al entrar por el objetivo.

Las lentes de distancia focal más corta proporcionan un campo de visión más amplio, pero ofrecen menos ampliación. Por el contrario, distancias focales más largas ofrecen un campo de visión más reducido, pero proporcionan una mayor ampliación.

La longitud focal de la lentes se mide en milímetros, y normalmente figura en el exterior del objetivo.

En función de la longitud focal, podemos diferenciar dos tipos de objetivos: los de focal fija y los zoom (o de focal variable). Vamos a verlo con dos ejemplos: si vemos el objetivo de la imagen superior vemos  que marca “50 mm” quiere decir que estamos ante un objetivo fijo cuya longitud focal siempre va a ser 50 milímetros.

Sin embargo, si pusiera en nuestro objetivo “70-300 mm” estaríamos ante un objetivo zoom o de focal variable, en el que 70 mm sería la mínima longitud focal que tenemos disponible, y 300 mm la máxima.

Así, un objetivo con una distancia focal más corta, sin entrar todavía en denominaciones o tipos, es un objetivo con el que vamos a incluir más elementos en nuestro encuadre, y hacemos que nuestro espectador se sienta parte de la escena. Sin embargo, una distancia focal mayor aísla más elementos en el encuadre y provoca un “aplanamiento” en la imagen entre el primer plano y el fondo. Ojo, esto no quiere decir que uno sea mejor que otro, sino que tenemos que ser conscientes de la foto que queremos tomar, de nuestras necesidades y del resultado que busquemos. Como leí en cierta ocasión en un libro del fotógrafo David duChemin, “son diferentes pinceles para diferentes cuadros”.

La abertura

La otra característica principal de nuestros objetivos es la apertura del diafragma (f). Cuando nos fijamos en las “letritas” (que técnico soy…) del objetivo, verás una serie de proporciones (1:2,8 , 1:4-5,6 , etc) que es la apertura máxima del diafragma del objetivo.

Veamos un par de ejemplos:

En la imagen superior, la proporción es 1:2,2 , lo que quiere decir que la apertura máxima de nuestro objetivo es 2,2 a cualquier longitud focal que dispongamos,  sea un objetivo de focal fija o no. Sin embargo, si la proporción fuera 1:3,5-5,6 en un objetivo 18-55 mm, la apertura máxima a 18 milímetros será 3,5 y a 55 milímetros será 5,6.

La apertura determina la cantidad de luz que la lente transmite al sensor de imagen. Cuanto menor sea el valor máximo de apertura mejor será la calidad de la lente en términos de luminosidad. Objetivos zoom de alta calidad proporcionan una apertura constante en todo el rango focal, mientras que en una lente de calidad inferior, la apertura del diafragma varía a medida que nos desplazamos por el rango focal (como vimos en el ejemplo de arriba). Un objetivo con un número f  bajo (gran apertura máxima), es una lente de mejor calidad, y nos permite disparar en condiciones de poca luz con unos resultados sorprendentes. Además, en los objetivos con grandes aperturas, la profundidad de campo es muy pequeña, con lo que conseguimos un efecto bokeh (o lucecitas desenfocadas maravillosas) precioso.

Estas son las características principales de los objetivos, pero hay otras que si debemos mencionar como puede ser la distancia mínima de enfoque, si el objetivo tiene estabilizador de imagen, la calidad de sus materiales, la nitidez, etc. La conjunción de todas estas características definen la calidad del objetivo en sí.

Tipos de Objetivos

• Ojo de pez

Este tipo de objetivo proporciona un campo de visión extremo, de 180º o más. Sus distancias focales rondan normalmente de 4 a 15 mm.

Dada la gran distorsión y la espectacularidad que provocan en la imagen, su uso es eminentemente creativo.

• Gran angular

Las distancias focales de estos objetivos suelen ir de 15 a 42 mm aproximadamente, y proporcionan un campo de visión más amplio que el de un objetivo normal. También provocan distorsión en la imagen.

Se usan sobre todo en fotografía de paisajes, aunque tiene más usos como puede ser fotografía en interiores reducidos, para retratos de grandes grupos de personas, etc.

•  Objetivos normales

Al decir objetivos normales no me refiero que el resto no lo sea, sino que este tipo de objetivos, que suelen ser fijos (50mm, 85mm, etc), reproducen con bastante exactitud lo que ve el ojo humano (en términos de perspectiva y ángulo de visión).

Para una cámara de 35 mm o una réflex full frame, el objetivo de 50 mm se considera el estándar. En distancias focales mayores (de 85 mm o 100 mm) este tipo de objetivos son ideales para el retrato.

• Teleobjetivos

Son los objetivos de distancia focal más alta. Permiten cerrar mucho el plano sin necesidad de acercarse demasiado, consiguiendo un efecto de compresión de planos en la imagen en sus distancias focales más altas, aislando elementos y dando lugar a una conexión entre los elementos en diferentes planos que de otra manera no podríamos conseguir.

 Se usan sobre todo en fotografía de fauna, deportiva, documental, etc. y en retratos en primer plano.

• Objetivos macro

Su distancia focal ronda entre los 50 y los 200 milímetros. Se caracterizan por tener una distancia mínima de enfoque muy muy reducida.

 

Pueden ser fijos o de zoom variables, y se suelen utilizar sobre todo en fotografía de insectos, flores, etc. aunque su uso puede ser llevado a cualquier elemento donde precisemos una imagen a tamaño real de algo muy pequeño.

Existen mas clases de objetivos, como los descentrables o los catadióptricos, mas especializados, pero los que hemos descrito son los más comunes.

Consejos

• Tapa siempre tu objetivo cuando no lo estés usando. Evitaras ralladuras y que te entre polvo.
• Si dispones de un parasol, úsalo siempre que te sea posible. Evitarás los malditos flares en tus fotos.
• Existe un concepto en fotografía denominado “punto dulce” que no es más que la apertura ideal del diafragma del objetivo donde éste va a desarrollar su mayor grado de calidad y nitidez a la hora de tomar la foto. Normalmente suelen ser aperturas intermedias (f8, f11), ya que en los extremos es donde hay una mayor distorsión. Te invito a que consultes a través de Internet cual es el punto dulce de tu objetivo.
• Ten en cuenta que la longitud focal de los objetivos puede no ser “real” si usas una cámara que no sea de formato completo (full frame), debido al factor de recorte de tu sensor. En mi caso, por ejemplo, antes de adquirir mi 5D Mark II, que es full frame, usaba una Canon 1100d, cuyo sensor está recortado y tiene un factor de recorte o conversión de 1,6. Tienes que multiplicar la longitud focal por el factor de conversión, y esa es la longitud focal que estas utilizando en realidad. Esto quiere decir que si a la 1100d le ponía un objetivo de 35mm (35 x 1,6 = 56) estaba trabajando a 56 milímetros.
• Mucho cuidado con los hongos en los cristales de nuestros objetivos, ya que en casos complicados la lente puede quedar inservible. Si vamos a adquirir un objetivo de segunda mano, asegúrate que esta limpio e impoluto de hongos.
• No des por sentado que te tienes que gastar un pastizal para adquirir un nuevo objetivo para tu cámara. Busca objetivos antiguos (en buenas condiciones, claro) incluso de otras marcas, ya que pueden darte igual o mejor resultado que un objetivo nuevo. Actualmente hay multitud de adaptadores circulando por internet para poner en tu cámara Canon o Nikon objetivos de Pentax u Olimpus, por ejemplo.

Lo importante es el resultado final en nuestras fotografías, y los objetivos, al igual que los cuerpos de cámaras, los filtros, etc son meras herramientas para conseguir transmitir nuestra intención al espectador. Porque uses un objetivo de 2000 € no significa que tus fotos vayan a ser mejores que las de tu amigo que usa el que venía en el kit de la cámara.   A medida que progresamos como fotógrafos, nos vamos familiarizando con nuestras herramientas, y seremos capaces de predecir antes de tomar la fotografía el resultado que vamos a conseguir con cada longitud focal.